El objetivo de este informe, es relatar una experiencia personal, llevada a cabo en Ibiza a finales de otoño del 2.011.
Antecedentes: Vivo en una pequeña casa unifamiliar, situada en una zona boscosa cubierta de pinos (pinus halepensis) con un denso sotobosque. Este año, de nuevo, la isla ha sufrido algunos incendios en nuestros bosques y este peligro pesa sobre muchos propietarios de terrenos forestales.
Desde muchos sectores: administración, asociaciones, particulares… y demás, tratan de dar con una solución para minimizar los riesgos de incendio; que son debidos a muchos factores: la presión demográfica que sufre la isla en los meses de verano, el cambio climático con veranos más calurosos, la situación de nuestra masa forestal… y un largo etc. Mientras se llega a una solución, uno, desde una óptica más personal, trata de minimizar estos riesgos en la medida de sus posibilidades y actúa directamente sobre el terreno.
Navegando por internet, encontré un artículo que habla de un sistema de calefacción, por medio de una estufa de leña de alto rendimiento. A medida que lo iba leyendo, imagine que este sistema también podría dar buenos resultados aquí en la isla. Salvando las distancias, allí zona del Chubut (Argentina), con inviernos duros (-5grados), los resultados eran magníficos y podía ser la solución para dar salida a los restos de ramas y arbustos; dar un valor a esta biomasa que crece y crece, y hace el bosque impenetrable. Rentabilizar un problema y convertirlo en una solución para pasar un invierno, térmicamente confortable.
Dirección de internet donde se puede obtener el dossier con las características, funcionamiento, planos de construcción…
http://www.inta.gov.ar/info/intainfo/doc/estufa.pdf
Las ventajas que ofrece esta estufa son muy claras:
-Alto rendimiento de funcionamiento, cercano al 90 %.
-Evita la alta humedad relativa, que existe en la isla, y se disipa con el uso de la misma.
-El diseño. Dependiendo de la longitud que se le da a la cámara de combustión (profundidad), el trabajo de corte de los leños y ramas es menor.
-Dar valor a un material considerado un desecho (problema).
-Coste y fácil fabricación; alguien con cierta habilidad y destreza la puede construir.
- …
Solo faltaba ponerme manos a la obra y comprobar resultados.
Manos a la obra: El material es fácil de encontrar en cualquier almacén de materiales de construcción, solo se trata de adaptar las medidas de los ladrillos refractarios y tejuelas, de los argentinos a los europeos.
Opte por el tamaño de estufa grande.
Sin problemas y con un poco de paciencia e ingenio, la adaptación es sencilla. Solo se trata de poner el primer ladrillo, uno detrás de otro se convierten en una estufa. Es como un “mecano”, sencillo e incluso divertido.
Seleccione un rincón del centro de la casa, así las paredes harían de masa térmica para obtener un mayor rendimiento.
Hay que evitar paredes que den al exterior (si se puede).
Hice una base de bloques para elevar la estufa del suelo y así facilitar su carga.
Se trata de seguir los planos y la estufa va tomando forma. Obsérvese que las paredes son de 10 cms de grosor de material refractario, lo cual es una gran masa térmica, que una vez calentada, mantendrá el calor.
“Poc a poc”
La estufa adquiere la forma definitiva. La cámara de combustión es alargada, con profundidad, así se pueden hacer leños más grandes (menos cortes, menos trabajo).
Falta encargar la puerta y la tapa superior, al herrero.
Puerta metálica, donde se observa el tiro de aire.
Finalizada.
Coste aproximado:
-Material de construcción……………………………………….. 200 €
-Herrero …………………………………………………………………..200 €
-Tubos, sombrero chimenea …………………………………….100 €
Coste total aproximado………………………………….………. 500 €
Funcionamiento:
Es muy importante respetar algunas medidas, una de ellas es el tiro de aire (1cms x 10cms), es el adecuado. Este va sobre la propia puerta y no necesita de ningún otro tiro de aire en el tubo de la chimenea.
En cuanto al diseño, es interesante hacer la puerta de un cierto grosor. Le di un centímetro para aumentar sus cualidades mecánicas, soportar dilataciones y poder cerrar la puerta empujando la leña. Se le puede colocar una ventana para ver la llama del interior… yo preferí valorar la sencillez en la construcción y evitar problemas (rotura, dilatamientos…)
El tubo metálico de la salida de humos de la estufa, lo pasé a la habitación contigua, caldeando el otro lado de la estancia. Utilizo codos de 45 grados, así los hollines no se quedan depositados en los mismos, cosa que ocurriría si fueran de 90 grados.
El sistema de limpieza es muy sencillo, tanto de la cámara de combustión como de la canalización interior dentro de la estufa. Solo hay que quitar con la mano las tejuelas y volver a ponerlas, accediendo desde la cámara y desde la tapa metálica superior (operación que solo se realizara una vez terminado el periodo invernal).
El funcionamiento es sencillo, una vez cargada e iniciada la combustión los humos calientes atraviesan la chimenea refractaria dentro de la estufa, y van transfiriendo calor.
Al principio se calentaran las partes metálicas, tapa y tubos metálicos, obteniendo un calor rápido, dada la buena conductividad del metal. La estufa tarda aproximadamente 45 minutos en llegar a pleno rendimiento, dada su gran masa térmica. Una vez en este punto, se cerrara el tiro, dejando solo una pequeña abertura suficiente para que realice una combustión lenta (con dos troncos de pino de 25cms de largo calienta toda la noche). Como dice el dossier, sorprende el ahorro y rendimiento que se obtiene de la leña (utilizo pino 15.125 kJ/kg)
La chapa superior adquiere una buena temperatura, dos recipientes metálicos evaporan esencias con agua, para conservar cierta humedad en el ambiente.
Salida al exterior y sombrerete.
Salida del tubo de humos a través de la habitación contigua, calentando la estancia.
La leña: Las ramas, arbustos y demás los voy recogiendo en cestas de plástico, tengo 12, una vez llenas les doy la vuelta y las dejo en el exterior, donde no se mojan y el sol al calentarlas (color negro) las va secando, aumentando el poder calorífico al disminuir la humedad. No importa que llueva.
Llenado de cestas
Cestas llenas.
Consumo 4 ó 5 cestas por día, metiendo algún que otro tronco de leña una vez conseguida la brasa.
5 cestas diarias que hacen un total de 150 cestas al mes. Y un total de 600 cestas en cuatro meses. Las cenizas se depositan en un montón, y se incorporan poco a poco al compost (para que no se forme lejía con el agua). Otra parte de las cenizas (tamizadas) utilizan las gallinas para desparasitarse en sus baños de arena.
El llenado de las 5 cestas es rápido y normalmente tengo 12 siempre dispuestas, por posibles inclemencias del tiempo atmosférico.
Conclusiones finales: La casa se mantiene confortable; es un calor agradable. Las paredes de esta estufa no adquieren la temperatura tan alta como lo harían las estufas metálicas, por lo que no hay peligro de que se quemen objetos cercanos. La temperatura en las paredes de la estufa, estimo que rondara los 120 grados C. y es un calor que se extiende por toda la casa.
El coste de la calefacción, en mi caso, es cero y de paso consigo hacer una labor de mantenimiento del bosque. Convertir un residuo en un valor.
Tengo la idea de colocar un termómetro de capsula cerca de la zona de combustión, en el exterior de la estufa, para controlar la temperatura (Carga de leña y tiro de aire). Permite extender el tiempo de ignición, conservando por más tiempo la leña. Así optimizo el uso de la estufa, además de controlar el exceso de humo emitido.
Cuando marca 200 °C o más, indica una pérdida de energía y un posible sobrecalentamiento. Esta temperatura se puede alcanzar al iniciar el fuego, no es recomendable para uso normal y continuo. De 100 °C a 200 °C la temperatura de funcionamiento es óptima, segura, combustión completa, máxima eficiencia y ahorro de leña. Menos de 100 °C la temperatura es demasiado baja, la combustión incompleta y exceso de humo y hollín.
Mas aplicaciones…
En primavera asistí a un Taller de Pan organizado por “Amics de la Terra” y cual fue mi sorpresa al ver la posibilidad de utilizar el horno de leña como horno de pan. Instale un Pirómetro (termómetro) en la puerta metálica; mejorando el control de la temperatura interior del horno y el funcionamiento como estufa/horno de pan.
Utilizándolo como horno de pan, se empujaran las brasas hacia el fondo de la cámara (alargada y profunda) y comprobando que la temperatura en el pirómetro sea la adecuada para el horneado del pan. Las pruebas oportunas las hare en invierno.